Cómo empezar en la fotografía inmobiliaria

Todo fotógrafo inmobiliario en activo tiene su propio enfoque, estilo y visión. Ábrete paso con estas ideas de fotografía de interiores.

Fotografía inmobiliaria de estilo moderno al atardecer

Introducción a la fotografía inmobiliaria

La fotografía inmobiliaria se distingue de otras disciplinas fotográficas por su combinación de arte y negocios. Para tener éxito como fotógrafo inmobiliario, debes comprender ambos mundos. Explora estos consejos de fotógrafos profesionales y prepárate para empezar tu andadura en el mundo de la fotografía inmobiliaria.

 

Realización de fotografías inmobiliarias

La mitad del reto de la fotografía inmobiliaria es desarrollar tu estilo artístico individual. “Tu estilo es tu carta de presentación. Es tu marketing y tu negocio”, explica el fotógrafo aéreo e inmobiliario Jonathan Boone. Tener un estilo refinado y uniforme te permite hacer más negocios.

En el sector inmobiliario, no puedes tener mucho control sobre el sujeto que fotografías, lo que significa que tus elecciones de composición e iluminación durante la sesión de fotos cobran gran importancia. “La forma en que editas las fotos, los ángulos que decides fotografiar, los sujetos que eliges seleccionar, todos esos aspectos forman parte de tu estilo”, afirma Jonathan Boone. Asimismo, debes retratar tu sujeto con precisión. El ángulo de la cámara influye enormemente en esa precisión, por lo que tómate tu tiempo para encontrar el mejor ángulo para cada habitación. Su hermano, el fotógrafo Gregory Boone, añade: “Si te encuentras en una cocina y estás apuntando con la cámara desde arriba hacia abajo, parece que estás tratando de hacer que la cocina parezca más grande de lo que es”. Esto puede hacer que una foto sea poco fiable, lo contrario de lo que quieres que la gente piense. Elige bien tus ángulos y elimina la distorsión involuntaria colocando la cámara en un trípode que esté a nivel del suelo.

Habitación vacía iluminada por el sol con suelo de madera y puertas francesas
Imagen inmobiliaria de interior de una cocina con azulejos blancos, horno negro y encimeras de madera
Fotografía inmobiliaria de un bonito baño de estilo moderno

Opciones técnicas a tener en cuenta

Cuando se trata del equipo, el trípode, las baterías adicionales y el almacenamiento de copia de seguridad son elementos esenciales. La experimentada fotógrafa inmobiliaria Jillian Lancaster sugiere: “Llévate tus objetivos gran angular, pero también un objetivo macro para hacer primeros planos con detalle”. Una distancia focal a partir de 14 mm o 16 mm es una buena opción para el ámbito inmobiliario, ya que te permite capturar toda la habitación en una sola fotografía y con una distorsión mínima. “Sea cual sea el objetivo que utilices”, comenta Lancaster, “lo más importante es que conozcas tu equipo. Debes saber cómo funciona tu cámara y tu software de edición, así como cuáles son tus limitaciones”. Es mucho más sencillo hacer una foto de gran calidad que editar una imagen mediocre más tarde.

Usa la distorsión de barril para realizar fotografías inmobiliarias que capturen vistas únicas de la casa.

Ejemplo de distorsión de barril

Cuando trabajes con un objetivo ultra gran angular, ten en cuenta cómo puede afectar a las fotografías. “Es fácil que se produzca una distorsión de barril sin querer, en la que los extremos de las imágenes empiezan a redondearse o arquearse”, explica el fotógrafo inmobiliario y de interiores Crosby Dove. Si bien estas distorsiones pueden ser una opción artística interesante, no son ideales para lograr grandes fotografías inmobiliarias. Si las líneas verticales de la habitación están distorsionadas, puede parecer poco realista y alejar a los posibles compradores de la vivienda.

 

Opciones de iluminación a tener en cuenta

Cuando se trata de iluminar fotografías inmobiliarias, los fotógrafos tienen distintas preferencias. Algunos optan por apagar todas las luces de la casa y fotografiar únicamente con la luz natural que entra por las ventanas. De este modo, se elimina la mezcla de colores involuntaria que producen las diferentes temperaturas de bombilla. Esta mezcla puede aportar matices poco naturales a las fotografías, lo que requiere realizar más ajustes en el posprocesamiento. Otros fotógrafos eligen mantener las luces interiores encendidas o complementar la luz natural con luces estroboscópicas o siempre encendidas.

Si trabajas en entornos con poca luz, ten cuidado al usar una apertura más amplia. Esto puede reducir la profundidad de campo y desenfocar la mitad de la habitación. En su lugar, utiliza una apertura estrecha y una velocidad de obturación más lenta para compensar la luz y lograr así una mayor profundidad de campo. Muchas de estas opciones se reducen al estilo y las preferencias personales, que pueden ser lo que distingue tu trabajo del de los demás.

Primera fotografía inmobiliaria de interior de exposición de una propiedad comercial

Primera imagen de exposición

Segunda fotografía inmobiliaria de interior de exposición de una propiedad comercial

Segunda imagen de exposición

Combinación de ambas imágenes inmobiliarias de interior de una propiedad comercial

Imágenes combinadas

A continuación, debes tener en cuenta la exposición. Dove explica: “Si miras por la ventana, puedes seguir viendo tanto el interior como el exterior de la habitación en la que estás. Las cámaras no pueden hacer eso en una sola exposición”. Haz varias fotos con diferentes exposiciones para capturar la luz en interiores y exteriores. Aquí es donde un trípode resulta de gran utilidad, ya que puede captar ángulos idénticos de la misma habitación y combinar esas fotografías en el posprocesamiento para capturar un alto rango dinámico (HDR).

 

Consejos sobre la fijación de precios y el lado comercial de la fotografía inmobiliaria

La fotografía inmobiliaria consiste en vender inmuebles, por lo que el arte de trabajar con agentes inmobiliarios es donde puedes triunfar o fracasar. “Es la forma en que llegas a una casa y actúas con el agente o el cliente”, explica Gregory Boone. “Eso dice mucho de tu estilo como empresario y fotógrafo inmobiliario”.

 

Desarrolla tus competencias interpersonales y cultiva una imagen profesional para tratar con tus clientes. Jonathan Boone comenta que “dedicar entre 15 y 20 minutos más para conversar con el dueño de la casa, con el fin de explicarle lo que haces y la técnica que utilizas, siempre ayuda”. Asimismo, da prioridad a la comunicación abierta con tus clientes inmobiliarios. Conseguir que las fotografías se editen y organicen a tiempo puede marcar una gran diferencia. Vender una casa es un proceso complicado, por lo que haz que las fotografías sean la parte más fácil y seguro que tendrás éxito. La creación de un sitio web actualizado y de gran calidad también es un aspecto importante a la hora de crear tu identidad empresarial.

 

Cada agente inmobiliario es diferente y quiere cosas diferentes. “Tendrás algunos clientes que prefieran mostrar todo y otros que quizás solo quieran 10 o 15 fotografías”, señala Dove. “Quieren que el comprador potencial concierte una visita para poder ver más”. Plantéate la opción de ofrecer diferentes niveles de servicio para que puedas satisfacer las necesidades y el presupuesto de cada cliente. A la hora de fijar los precios de las nuevas listas, contempla la posibilidad de cobrar por habitación o metros cuadrados, así como ofrecer paquetes más amplios que incluyan un trabajo más detallado. Sé sincero con tus clientes inmobiliarios acerca de los costes y no temas mencionar el tiempo empleado en el proceso de posprocesamiento de Adobe Photoshop o Lightroom cuando hables sobre el plazo de entrega. Solo quieren que su listado inmobiliario esté bien, así que haz lo que esté en tu mano para poder ayudar.

Persona que fotografía una casa cerrada para un agente inmobiliario

Cuando das los primeros pasos, Lancaster aconseja que “valores tu tiempo y tu dinero, crees un plan de negocio y no regales tu trabajo”. Practica en tu casa o en las casas de tus amigos, o ve a iglesias o edificios públicos para adquirir experiencia capturando distintas arquitecturas para tu portafolio. Una vez que hayas conseguido algunos trabajos, asegúrate de pedir comentarios. Comprueba lo que a tus clientes les ha gustado de tu trabajo y pregunta sobre las áreas que se deben mejorar. La fotografía inmobiliaria requiere tiempo y práctica para dominarla, de modo que sigue esforzándote para mejorar el aspecto artístico y financiero de tu negocio.

 

Lo que está por venir para tu negocio de fotografía inmobiliaria

Estate siempre dispuesto a aprender cosas nuevas. La tecnología y los equipos cambian constantemente, al igual que la decoración del hogar y las tendencias inmobiliarias. “Cuando empecé, las paletas de colores [en las casas] estaban compuestas por rojos intensos, azules oscuros y verdes”, afirma Lancaster. “En todas las casas de artesanos te encontrabas con paredes de colores superintensos. Ahora todo está pintado de blanco”. Es importante aprender a adaptar tu estilo de fotografía a las cambiantes tendencias del hogar. Una iluminación que funciona bien con paredes de colores puede velar una habitación con paredes blancas.

La fotografía con drones y aérea, la puesta en escena virtual, los recorridos virtuales, los tutoriales de vídeo y las representaciones en 3D son las principales innovaciones técnicas que afectan a la esfera inmobiliaria. Mantenerse al tanto de estos cambios requiere tiempo y dinero. No te dejes llevar por todas las tendencias que se te presenten. Perfecciona tus habilidades en un área antes de ofrecer más opciones que puedan resultar insatisfactorias. Tu objetivo es hacer que la casa luzca bien, por lo que desarrolla competencias que te ayuden a lograr esa meta.

Fotografía inmobiliaria aérea de una casa de varias plantas

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