Animación con folioscopio y creación de una
Si quieres entender los aspectos básicos de la animación o dar vida a tus garabatos, basta con un simple folioscopio.
Con esta sencilla forma de animación artesanal, no te hará falta un equipo caro ni tener conocimientos técnicos. Tan solo precisas de un boli, un taco de papel y tu imaginación.
En esta guía, veremos cómo funcionan las animaciones con folioscopio y te enseñaremos a crear una.
¿Qué es un folioscopio?
- En una animación con folioscopio, se utiliza una serie de imágenes que cambian de posición de forma progresiva de una página a la siguiente. Estas imágenes pueden dar la sensación de movimiento cuando se pasan las hojas en las que están dibujadas con velocidad en una secuencia.
- Los folioscopios varían en complejidad. Puede que hicieras alguno en el colegio, dibujando monigotes en un libro de texto o en un bloc de papel, o puede que hayas visto algunos ejemplos de folioscopios espectaculares en Internet, como los que te mostraremos en esta guía.
- Sea como sea, la esencia de los folioscopios es la misma. Como muchas otras formas de animación, se basan en una ilusión óptica denominada persistencia de la visión. El ojo humano solo puede procesar entre diez y doce imágenes por segundo. Cuando las imágenes aparecen en una sucesión más rápida que esa, el cerebro las fusiona en un flujo continuo.
Ejemplos de la animación con folioscopio
¿Buscas inspiración para tu folioscopio? Encontrarás muchos ejemplos en YouTube, Instagram y TikTok, que van desde estilos de animación clásicos hasta giros revolucionarios.
Aquí tienes algunos de los mejores ejemplos online de la animación con folioscopio.
Cómo empezó todo
El creador theflippist cuenta una historia autobiográfica sobre cómo empezó en el mundo de las animaciones con folioscopio. Consigue reflejar su recorrido a la perfección mediante unas impactantes ilustraciones que sumergen a los espectadores en su historia y presenta cada cuaderno con estilo, brevedad, humor y precisión.
Dar vida al origami
El apasionante trabajo de Amy Pirkle (también conocida como PerkolatorPressFlipbooks) es una muestra de lo agradable que el folioscopio basado en origami puede ser para la vista. Expone la eficacia del uso de formas claramente definidas a la hora de crear un objeto; en este caso, un zorro, y combina bonitas ilustraciones con una buena historia.
Rediseño de los cuadernos
El folioscopio, un instrumento simple, pero eficaz, demuestra que los movimientos entre imágenes individuales pueden tener un gran impacto sin necesidad de tener color. VISITORS, con sede en Shanghai, muestra que unos simples dibujos a lápiz bastan para transformar un personaje en otro y conseguir un efecto increíble, a la vez que se mantiene la intensidad.
El meta folioscopio
Aquí, theflippist aporta un enfoque subversivo al género: un folioscopio dentro de un folioscopio. Los colores, tanto primarios como secundarios, se funden para crear una composición que transporta al espectador a un submundo dentro de otro mundo, todo ello en formato de folioscopio.
Folioscopios con decorados adicionales
El creador Roger Wieland consigue decorados adicionales con el uso de briznas de hierba en esta animación de una cortacésped. A medida que la figura siega la hierba en este colorido folioscopio, que captura cada rotación de la segadora a la perfección, la hierba salta entre las páginas cuando la animación llega a su fin. Este efecto extra muestra cómo los efectos adicionales pueden ser una gran ayuda para que un folioscopio destaque.
Cómo los folioscopios han cambiado la animación
La persistencia de la visión era clave en los primeros dispositivos de animación, como el zoótropo. Estos artilugios cilíndricos impresionaron a la audiencia de la época victoriana al presentar una veloz secuencia de imágenes dentro de un tambor en rotación.
Sin embargo, los folioscopios son algo distintos, presentan imágenes en una secuencia lineal, en vez de en un dispositivo circular. En realidad, el pionero de los folioscopios fue el pintor victoriano John Barnes Linnett, en la década de 1860. Su potencial para la animación y el cine se hizo evidente en seguida.
A finales del siglo XIX, los primeros dispositivos de imágenes en movimiento, como el mutoscopio, reemplazaron las páginas en papel del folioscopio con impresiones fotográficas.
Con la llegada del vídeo, los principios del folioscopio sentaron las bases de las técnicas de animación con celuloide tradicionales. Los equipos de animación de desde Willie y el barco de vapor hasta ¿Quién engañó a Roger Rabbit?, dibujaban cada vez más secuencias de imágenes lineales en el celuloide y las proyectaban en una sucesión veloz. También utilizaban los folioscopios para planificar los dibujos y las interpolaciones.
En la actualidad, las técnicas de animación a mano han quedado relegadas en el sector cinematográfico y televisivo, reemplazas por las animaciones por ordenador, que son más populares. Sin embargo, una subcultura de aficionados de la animación clásica ha desempolvado los folioscopios y los ha traído de vuelta a las redes sociales.
En el siguiente apartado hablaremos de por qué siguen siendo populares.
¿Te fascina el mundo de la animación?
Sigue aprendiendo con nuestra guía de animación para principiantes.
¿Por qué son los folioscopios tan populares?
Desde los mutoscopios hasta Monstruos S.A., la animación ha cambiado mucho desde sus primeros días. Se han abandonado muchas técnicas. Pero ¿por qué las animaciones con folioscopio siguen vigentes?
1. Solo precisan de materiales básicos
La mayoría de las animaciones requieren un programa, un equipo y habilidades técnicas. Dicho de otro modo, debes averiguar la velocidad de fotogramas a partir de tus fotogramas clave. Además de esto, hay que dibujar, modelar y crear los personajes, claro.
Para hacer un folioscopio de animación, basta con un taco de papel, un lápiz o boli y una buena idea.
2. Son una vía de acceso a la animación
Muchos animadores dieron sus primeros pasos con garabatos en un folioscopio. Es una buena forma de dar vida a los personajes, probar escenas y perfeccionar tus habilidades creativas.
Tú también puedes empezar desde abajo. Imagina un coche moviéndose por la página, un niño botando una pelota o una flor creciendo al sol. A partir de esto, puedes crear historias y conceptos más elaborados.
3. Son fáciles de enseñar
Un folioscopio es una herramienta muy valiosa si estás enseñando los fundamentos de la animación a estudiantes o principiantes. Proporciona una manera accesible de dibujar un personaje o contar una historia.
4. Son un buen regalo
Son el regalo creativo perfecto. ¿Por qué no contar la historia de la primera vez que conociste a tu pareja, o presentar a tu mejor amigo la broma de siempre con un folioscopio?
5. Son accesibles
No hace falta que seas un artista para crear un folioscopio. De hecho, los dibujos rudimentarios pueden ser tan eficaces como los diseños más realistas, creativos o complejos. Además, puedes hacer uno de lo que quieras gracias a los pocos materiales que hacen falta.
6. Los profesionales también los utilizan
Los folioscopios no son solo para novatos. Los artistas, dibujantes y animadores profesionales los utilizan para mostrar su boceto, mientras que algunos incluso crean folioscopios para venderlos como arte o souvenirs.
Otros utilizan sus folioscopios para ganar seguidores online. De hecho, varios artistas y animadores se retan a sí mismos a crear uno en solo una hora. Los resultados pueden ser fascinantes.
7. Son populares en YouTube y perfectos para Instagram
Los vídeos de #folioscopios son muy populares. El canal “Andymation”, del artista profesional Andy Bailey, tiene 4 300 000 suscriptores en YouTube y combina folioscopios increíbles y vídeos stop motion con tutoriales accesibles.
Instagram y TikTok también están llenos de ideas para hacer folioscopios creativos, desde trágicas historias de amor de peces dorados hasta monigotes que bailan. No hay límites para lo que puedes hacer en un folioscopio.
Cómo crear un folioscopio de animación
Los folioscopios son una de las formas más simples de animación, pero hay que tener en cuenta ciertos temas si quieres hacer el tuyo bien.
Ofrecemos algunos consejos para que tu dibujo del cuaderno animado salga perfecto.
1. Reúne todos los materiales
En realidad, para empezar, te basta con un bloc de papel y un lápiz o boli.
Si utilizas un bloc de dibujo, ten en cuenta:
- El tamaño, 7,5 cm × 12 cm: Las páginas más pequeñas se pasan con facilidad, puesto que tienen menos resistencia al aire.
- El papel, fino y de buena calidad: Tienes que ser capaz de ver a través del papel para calcar tu siguiente imagen. Pero que nos sea demasiado fino. El papel vegetal, por ejemplo, se romperá.
- El fondo, tiene que ser blanco: Esto te dará una base firme, útil cuando dibujes. También dará a tu bloc una sensación nítida cuando pases las páginas con velocidad.
Otra opción es comprar un folioscopio en blanco de las tiendas de material de arte. Son blocs regulares, creados específicamente para la animación con folioscopio.
También puedes unir papeles con grapas, clips o pegamento.
Consejo: utiliza un panel de luz LED detrás de tu folioscopio. Te ayudará a calcar tus imágenes.
2. Asegúrate de tener clara la historia
Antes de empezar, es importante saber qué vas a crear. Piensa en los personajes, la historia y el estilo de tu folioscopio. Te ayudará a crear una animación más entretenida y coherente.
Consejo: podrías hacer un boceto de las poses clave en animación. Estas son las posiciones espaciales básicas que tu personaje u objeto seguirá. Utilízalas como punto de referencia para correlacionar los movimientos entre ellas.
3. Crea tu primer dibujo
Es hora de empezar a dibujar. Traza tu primera imagen en la última página del folioscopio. Las páginas de los folioscopios se pasan mejor de atrás para delante, así que este será el punto de partida.
Es mejor centrarse en la parte derecha de la hoja. Las imágenes no se verán con claridad si te acercas mucho al lomo del cuaderno.
4. Añade una capa para tu siguiente dibujo
Ahora que has dibujado la primera imagen, es hora de empezar a crear una sensación de fluidez.
Para hacer esto, pon la penúltima hoja encima de la primera ilustración (recuerda que estás trabajando de atrás para delante).
Deberías poder ver la ilustración anterior a través de la página. Utilízala como punto de referencia para tu siguiente imagen. Este fotograma debería desviarse ligeramente de la primera imagen, siguiendo el movimiento de tu animación.
5. Continúa tu secuencia
A continuación, sigue añadiendo capas. Haz un progreso gradual de un fotograma al siguiente hasta que tengas un movimiento fluido y suave.
Sigue dibujando y añadiendo imágenes hasta que acabes la secuencia. Cuantas más páginas incluyas, más fluida será tu animación.
¿Sabías que...? La animación a mano es un proceso laborioso. Más de 600 animadores y artistas trabajaron en la clásica película de Disney El rey león, de 1994.
6. Añade los toques finales
Una vez que hayas acabado la animación con folioscopio básica, puedes volver y añadir escenario, características y color. El producto final puede ser tan detallado o minimalista como quieras.
7. ¡Pasa las páginas con velocidad!
¿Lo tienes ya listo para ver el resultado? Presiona el cuaderno contra tu pulgar, libera cierta presión y pasa las páginas en una secuencia. ¡Listo! Has creado una animación.
8. Comparte tu creación
Para finalizar, comparte tu folioscopio con el mundo. Puedes regalarlo o enseñarlo a un amigo en persona. Sin embargo, si quieres publicarlo en Instagram, TikTok u otros canales de redes sociales, debes grabarlo antes.
Para ello, monta una cámara en una posición aérea sobre la mesa o el fondo; recuerda que tendrás que meter el folioscopio y tus manos debajo. A continuación, graba la animación de tu folioscopio. Cuando hayas acabado, utiliza un software de edición para recortar el vídeo y editar cualquier paso en falso. Añade música y súbelo a tu plataforma favorita.
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Preguntas frecuentes sobre la animación con folioscopio
¿Cómo creo un folioscopio animado en PDF?
Para hacer un folioscopio animado en PDF, el primer paso es crear archivos PDF individuales para tus páginas. Puedes convertir imágenes a PDF de forma gratuita con Adobe Acrobat Online. Simplemente, arrastra y suelta tu archivo JPEG, PNG u otro tipo de archivo de imagen directamente en el editor para empezar.
Puedes usar un software de animatic, guion gráfico, presentación de diapositivas o presentaciones para crear tu folioscopio. También puedes utilizar un software, como Photoshop, para secuenciar y dar ritmo a tus imágenes.
¿Cómo se hace un folioscopio virtual?
Puedes crear folioscopios virtuales con programas como Photoshop e Illustrator. Tienes que cargar y secuenciar los dibujos individuales de tu cuaderno animado. También puedes utilizar plataformas específicas de animación con folioscopio. Esto te permite dibujar, calcar y dar ritmo a tus imágenes para crear un folioscopio.
¿Se considera el folioscopio una animación tradicional?
Los folioscopios son los precursores de las técnicas de animación tradicionales, como la animación en celuloide. Los animadores en celuloide emplean un principio similar, dibujan en las hojas de celuloide antes de proyectarlas y grabarlas. En ambas técnicas, los animadores dibujaban un gran número de imágenes secuenciales para crear la ilusión del movimiento.