Cómo usar los ajustes de exposición de la cámara.
Elegir la apertura, la velocidad del obturador y el ISO adecuados no es siempre una tarea sencilla. Asegúrate de que las fotos sean claras y brillantes con estos útiles ajustes para la cámara.
¿Qué es la exposición de la cámara?
La “exposición” es la intensidad u oscuridad de la foto. Las fotografías subexpuestas (poca luz) son oscuras, mientras que la sobreexposición (demasiada luz) hace que todo sea blanco y descolorido.
Existen tres elementos que afectan a la exposición:
- Velocidad del obturador: rapidez con la que se abre el obturador. Las velocidades más rápidas del obturador permiten que entre menos luz.
- Apertura: cantidad de luz que deja entrar el objetivo. Una apertura inferior (número f) significa que el objetivo es más amplio, lo que permite que entre más luz.
- ISO: sensibilidad a la luz del sensor de la cámara. Un ISO alto significa que la cámara es más sensible a la luz, lo que ayuda en condiciones de poca luz.
La clave para perfeccionar las fotos es encontrar la velocidad del obturador, la apertura y el ISO adecuados para tus condiciones de iluminación concretas.
Configuración de la cámara para ajustar la exposición.
Equilibrar estos tres elementos de exposición puede parecer difícil, pero la cámara tiene unos ajustes que te ayudarán a encontrar la configuración de exposición adecuada:
- Automático: la cámara selecciona automáticamente todos los ajustes en función de las condiciones de iluminación.
- Prioridad de apertura: puedes elegir la apertura y la cámara seleccionará automáticamente la velocidad del obturador y el ISO. Esta es la mejor opción para elegir la profundidad de campo, normalmente para retratos.
- Prioridad de velocidad del obturador: puedes ajustar la velocidad del obturador y la cámara seleccionará automáticamente la apertura y el ISO. Esta es la opción más adecuada para las fotografías de acción, para las que se necesita una velocidad de obturación rápida, o bien para las fotografías de exposición larga.
- Manual: puedes elegir todos los ajustes, sin ninguno automático. Se trata de la opción más complicada de dominar, pero te permite tener el máximo control de tus fotografías.
Incluso con los ajustes adecuados de la cámara, es posible sobreexponer o subexponer las fotografías. Por suerte, puedes ajustar la exposición de la cámara posteriormente gracias a un software de edición de fotografías como Adobe Photoshop Lightroom, que permite aclarar u oscurecer la fotografía fácilmente moviendo un regulador.
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